LLORANDO A SOLAS

Ya caída la tarde, cuando el padre sol se oculta tras el cerro, mi mente soñadora se presta a dialogar contigo.
Larga como la sombra de la noche será esta última, querida amada mía, y en ella encontrarás reflejos de otros días. Del amor que juraste no habrá olvido, y al hombre que dijiste serás mío.
Metido en tus promesas voy buscando el cariño de esos días, y vuelvo a ver la bella del ayer y el... castillo de amor que prometía.

No quisiera destrozar sueños ajenos forjados al calor de amor tardío, que has querido ofrecer sin ser olvido a tu mente y corazón, del que quieres, y siempre tú has querido.
Soy yo, yo mismo, el que te ama de antaño todavía. Quien te ve diferente?

¡Ah! Cabecilla loca, alma pueril y vana, que eternizar pretendes la abrileña mañana y detener el tiempo con tu manita leve. Ni con todos tus soles derretirás esta nieve.
Ya me voy, ya me vuelvo a mi sombra, a mi oscuro cuchitril donde puedo llorar, donde puedo gritar un poco sin que me asalte el miedo de ser cursi. Tengo el corazón enfermo de un ominoso mal. mis días transcurren en un mar de melancolía, y en mis noches de inconformidad no queda espacio para la esperanza.
Safe Creative #1208312202351

A LO QUE CANTO

Aquí estoy cantando
bajo el cielo de un crepúsculo los tiempos del recuerdo.

Canto a los estremecimientos frios que mi alma sin la tuya
por caminos estraviados han viajado.

No canto a las voces frias de la noche, ni a la luz que triste se posa en las esquinas,
ni a las palabras mesquinas de olores repentinos.

No odio lo que puede ser superflo en el largo camino de infinitos, pero si, a los ojos que mienten en el cruce de miradas.

No canto a la opaca oscuridad que como sombra se mueve en oscuros laberintos, ni a la memoria fingida que que siempre tiene un techo.

Canto a la infinitud
en que acompaño tu imagen más allá de tus ojos,
y a este amor inmortal que traspasa mis muros.
 
Safe Creative #1208312202351

ME ABISMA

Aveces no quisiera encontrar en mi recuerdo el opaco color de tus ojos en los momentos tristes que juntos compartimos,
ni ese grueso sabor de arena brotando de tus labios, ni tampoco tu silencio afin y recurrente cuando saciaba en tu piel mis ansias antiguas e ingenuas.
No quisiera recordar como en la esplanada de tu vientre no hubo nunca palpitares pues tu silencio le opacó el deseo.
Ni como tus piernas, dóricas bellezas, jamás se humedecieron, pues tus riachuelos para mi se habían secado.
No quiero recordar porque me abisma como jamás broto de tus entrañas ni un ligero crepitar de tus sentidos.
Safe Creative #1208312202351